Investigación de la UNTDF amplía la base de datos de ADN ambiental de peces del Canal Beagle

"Patagonotothen tesellata" en Canal del Beagle (2018) Créditos: Mauro Marcinkevicius
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La investigación realizada en el Instituto de Ciencias Polares, Ambiente y Recursos Naturales de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego se centró en la optimización del método de metabarcoding de ADN ambiental para evaluar comunidades de peces en el Canal Beagle, una técnica innovadora que permite detectar especies sin necesidad de capturarlas, analizando rastros genéticos presentes en el agua y sedimentos.
En el trabajo realizado por la bióloga Karen Montaño Guzmán, aplicó el método de metabarcoding de ADN ambiental que consiste en analizar muestras del medio ambiente —como agua, suelo o sedimentos— que contienen fragmentos de ADN liberados por los organismos (células, escamas, mucosas, etc.) sin necesidad de capturarlos físicamente. El proceso básico incluye recolección de muestras ambientales donde se espera encontrar rastros genéticos, extracción del ADN ambiental presente en esas muestras, amplificación por PCR de regiones genéticas específicas (marcadores o “códigos de barras” genéticos) que permiten identificar taxones. Secuenciación masiva para obtener millones de fragmentos de ADN de múltiples especies presentes simultáneamente y finalmente la comparación con bases de datos genéticas para identificar qué especies están presentes en la muestra.

Su investigación, titulada “Optimización del método de metabarcoding de ADN ambiental (aDNA) para evaluar comunidades de peces en el Canal Beagle”, fue dirigida por la Dra. Cristina Nardi (ICPA-UNTDF y CONICET) y codirigida por el Dr. Facundo Llompart (CONICET), ambos con reconocida trayectoria en estudios de biodiversidad marina.

El trabajo aporta la incorporación de secuencias de ADN de 17 especies locales, aumentando en más del 25% la cobertura genética disponible para la región. Este avance mejora la precisión del monitoreo ambiental y fortalece herramientas no invasivas para la conservación marina, vitales frente al cambio climático y las presiones sobre los ecosistemas australes.
Aumentar la cobertura de bases de datos genéticas locales es fundamental porque mejora la precisión en la identificación de especies y comunidades biológicas, al contar con referencias específicas de la biodiversidad local, lo que permite detectar con mayor exactitud la presencia y distribución de organismos en estudios ambientales. Por otra parte, facilita el monitoreo ambiental no invasivo, utilizando técnicas como el metabarcoding de ADN ambiental que dependen de bases de datos completas para interpretar correctamente las secuencias genéticas encontradas en muestras de agua, suelo u otros medios.
Y finalmente destacar que el trabajo contribuye a la conservación y manejo sostenible de ecosistemas, porque conocer la diversidad genética local ayuda a identificar especies en riesgo, evaluar la salud de poblaciones y diseñar estrategias de protección adaptadas a las características específicas del territorio.

Fuente: Comunicaciones Universidad Nacional de Tierra del Fuego 

El aporte principal del trabajo de la bióloga, fue optimizar este proceso para el contexto local del Canal Beagle, una región de alta riqueza ecológica y escasa representación en bases de datos genéticas

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