El buque Falkor too regresa a aguas argentinas para explorar cañones submarinos frente a Río Negro y Chubut

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El buque Falkor (too) del Schmidt Ocean Institute retornará este martes 30 de septiembre a aguas argentinas para realizar una nueva expedición científica. En esta misión, junto con un equipo interdisciplinario del CONICET y especialistas internacionales, estudiará el sistema de cañones submarinos Bahía Blanca, ubicado frente a la costa de Viedma en la provincia de Río Negro. Posteriormente, avanzará hacia los cañones Almirante Brown, frente a la provincia de Chubut.
Esta campaña busca comprender cómo estos cañones influyen en la dinámica de las corrientes oceánicas, en la entrada de aguas del Atlántico y en la productividad biológica que sostiene los recursos pesqueros del Mar Argentino. El buque, que es un laboratorio flotante de última generación, cuenta con avanzados equipos tecnológicos como ecosondas multihaz, vehículos submarinos operados remotamente (ROV), ocho laboratorios especializados y un sistema de posicionamiento dinámico.
El Falkor (too) permite llevar adelante exploraciones científicas profundas con capacidad para mantener más de tres meses de navegación sin escalas, proporcionando datos para investigaciones que abarcarán más de una década. Las investigaciones incluyen estudios de ADN ambiental, dinámica de sedimentos, reproducción de especies profundas y el impacto de residuos antrópicos. La misión destaca también por su carácter formativo, integrando a becarios, doctorandos y estudiantes en el trabajo de campo.
Para seguir en vivo las transmisiones del buque Falkor (too) del Schmidt Ocean Institute, se puede acceder principalmente al canal oficial de YouTube del Schmidt Ocean Institute, donde se transmiten en streaming las expediciones, mostrando imágenes y videos en tiempo real desde el fondo del mar, además de comentarios de los científicos a bordo. También se puede seguir a través del canal “Talud Continental IV Falkor (Too)” (@gempa.ar) en redes sociales, que ofrece actualizaciones instantáneas y avisos directos cada vez que se inicia una nueva inmersión. Además, han habilitado un canal de WhatsApp oficial para recibir novedades minuto a minuto sobre las actividades del buque.
Estas transmisiones permiten al público general observar en directo la exploración submarina y participar en una experiencia científica inédita, generando gran expectativa y seguimiento en redes sociales y plataformas de streaming

El buque operado por el Schmidt Ocean Institute, que zarpará este martes 30 de septiembre y durante un mes, hasta el 29 de octubre, explorará otros dos cañones submarinos. Esta vez se trata de una campaña científica multidisciplinaria, que integra oceanografía, geología y biología marina, frente a las costas patagónicas.
“La Corriente de Malvinas tiene influencia a lo largo de todo el talud. Lo sabemos por modelos numéricos y observaciones, pero ahora tenemos la oportunidad de investigar, in situ, cómo interactúa con los cañones submarinos del margen continental. Ahora bien, estos dos cañones, a diferencia del de Mar del Plata, donde se realizó la expedición anterior, no son ciegos, sino que inciden sobre el margen superior, justo donde termina la plataforma y se inicia el talud. Nuestra hipótesis es que tienen un impacto decisivo al facilitar el intercambio de aguas de la Corriente de Malvinas”, explica Silvia Romero, la oceanógrafa que liderará la expedición, investigadora del Servicio de Hidrografía Naval (SHN) y profesora del Departamento de Ciencias de la Atmósfera y los Océanos (DCAO) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.

Parte del equipo de científicas y científicos argentinos que participan de esta nueva campaña a bordo del Falkor (too). Foto: Diana Martinez Llaser

“Esta corriente presenta una particularidad muy importante: fluye hacia el norte trayendo aguas subantárticas con alto contenido de nutrientes y baja clorofila, o sea, baja concentración de fitoplancton. Esto quiere decir que, al ingresar a la plataforma, la fertiliza. En síntesis –resume Romero–, vamos a hacer geología marina y oceanografía física para saber si efectivamente los cañones submarinos son rutas de entrada para aguas ricas en nutrientes hacia zonas menos profundas, para comprender exactamente cómo ingresa el agua a la plataforma y cómo sale, y para entender cómo impacta esto en los organismos que están en la base de la cadena trófica, el fitoplancton y el zooplancton”.
Pero las aguas oceánicas no se mueven todas al mismo tiempo ni en la misma dirección: en la plataforma continental, actúan el viento, las mareas y la descarga de los ríos. Y bajo la superficie, cada corriente, también la de Malvinas, está formada por distintas masas de agua, cada una con sus propias características de temperatura, salinidad y densidad.
Para desentrañar exactamente lo que ocurre allí abajo, otras tres científicas conducirán junto a Silvia Romero la investigación en altamar. Ellas son Laura Ruiz Etcheverry, oceanógrafa del Centro de Investigaciones del Mar y la Atmosfera (CIMA, UBA-CONICET); Graziella Bozzano, especialista en geología marina; y Ornella Silvestri, especialista en oceanografía geológica, ambas del SHN y el CONICET.
Con una larga lista de instrumentos, realizarán muy diversos estudios y mediciones. “Por lo pronto, vamos a utilizar la tecnología que ofrece el Falkor (too), por ejemplo, el ROV SuBastian –señala Silvestri–, operado desde el barco, pero también otro vehículo submarino autónomo. Y las ecosondas que aporta el SOI, que nos permiten conocer la forma del fondo marino y comprobar que las cabeceras de los cañones efectivamente conecten con la plataforma”.
“También vamos a usar la roseta con botellas Niskin para tomar muestras de agua, de modo remoto y simultáneo, a distintas profundidades, para medir su salinidad, concentración de oxígeno, temperatura y fluorescencia, entre otras variables”.

Fuente: Pablo Taranto en https://nexciencia.exactas.uba.ar/

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