Río Negro se consolida como una de las principales regiones productoras de cebolla en Argentina

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La provincia de Río Negro se consolida como una de las principales regiones productoras de cebolla en Argentina, cultivando alrededor de 6.700 hectáreas distribuidas en diversas zonas estratégicas. El Valle Inferior lidera la producción con 2.500 hectáreas, seguido por el Valle de Conesa con 1.500 hectáreas, el Valle Medio con 2.250 hectáreas, Río Colorado con 350 hectáreas, y el Alto Valle con 115 hectáreas.
El procesamiento de la cebolla, destinado mayormente a la exportación, se lleva a cabo en poco más de una docena de galpones de empaque, que generan un importante movimiento de mano de obra durante la temporada de cosecha. Este sector productivo tiene potencial de expansión, debido a que en los últimos años se registró un notable incremento en la superficie cultivada. Sin embargo, la inestabilidad del mercado de cebolla debe considerarse al momento de planificar las inversiones, para Juan Jose Gonzalez Kehler, profesional del INTA San Javier –dependiente del INTA Valle Inferior de Rio Negro – es clave disminuir los riesgos logrando un menor costo por unidad producida. Así como también, procurar un uso eficiente de insumos, recursos naturales y humanos. La producción de cebolla en la provincia no solo es un motor clave para las exportaciones argentinas, sino también una fuente de empleo local con perspectivas de crecimiento.
Entre el 85% y el 90% de la cebolla exportada por Argentina proviene de Río Negro y el principal destino es Brasil. Los envíos al exterior, que se realizan entre abril y julio, también abastecen otros mercados internacionales garantizados por las técnicas de guarda en pilas, las cebollas cultivadas en Río Negro están disponibles en el mercado desde enero hasta septiembre y durante la mayor parte del año. Durante la temporada 2023/24 el país vecino experimentó una situación desfavorable debido al exceso de lluvia durante el período de siembra (fenómeno climático El Niño) que provocó una disminución del 30% en los rendimientos de sus principales zonas productivas, especialmente en el sur del país. Este escenario de escasez impulsó los precios y permitió un aumento en las exportaciones de cebolla desde Argentina.

En el marco del proyecto regional 2023-PE-L01-I038 “Aportes a la sostenibilidad de los sistemas hortícolas y cultivos diversificados de la Patagonia Norte” el economista Juan Jose Gonzalez Kehler publicó un trabajo de investigación cuyo objetivo fue analizar las expectativas iniciales de la temporada 2024/25 del circuito productivo de la cebolla en Brasil. Indicando que de enero a junio de 2024, Argentina exportó 196 mil toneladas de cebollas a Brasil, este volumen marcó un incremento del 102% en comparación con el mismo período de 2023, en el que las exportaciones alcanzaron 97 mil toneladas entre los meses de abril y mayo que históricamente son de mayor demanda en Brasil. Sin embargo, el panorama para la temporada 2024/25 podría cambiar significativamente, porque se espera que las condiciones climáticas mejoren con la llegada del fenómeno La Niña. Algunas estimaciones indican una siembra similar a la de 2023 en superficie, pero con una mayor productividad. 

La Empresa de Investigación Agropecuaria y Extensión Rural de Santa Catarina, el principal estado productor de cebolla en Brasil, proyecta un aumento del 37,4% en la producción, impulsado por un incremento del 29,3% en los rendimientos. También se espera mayor oferta desde el Nordeste brasileño, segunda zona productiva del país, por implementación de sistemas productivos de ciclo corto tecnificados.
Este aumento en la producción brasileña plantea un desafío para los productores argentinos, siendo Brasil el principal mercado de exportación de cebolla que cuenta Argentina con más del 80% de lo exportado. Durante los años regidos por La Niña, Brasil tiende a reducir sus importaciones de cebolla, en promedio de 45 mil toneladas según un estudio reciente de INTA. La inestabilidad en la producción brasileña, influenciada por las condiciones climáticas, plantea un escenario de riesgo para los exportadores argentinos. Aunque el contexto de 2023/24 fue favorable para Argentina debido a la escasez de cebolla en Brasil, las perspectivas para 2024/25 indican una recuperación de la oferta brasileña, lo que podría afectar la demanda de cebolla importada y, por ende, la participación argentina en ese mercado clave.

Fuente: INTA-Centro Regional Patagonia Norte

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